Carlos S. Beltrán Las Palmas de Gran Canaria
Canarias7.es
En la fotografía de pie, Chelo García Pérez - Pedagoga y Presidenta de la ONGD Maye - Proyecto de Cooperación Educativa Internacional para el Desarrollo - en reunión con las madres de los niños/as de la escuela.
Las dos cooperantes canarias residentes en la localidad haitiana de Anse-a-Pitres, Lourdes Gómez y Diana, no han sufrido daños y se encuentran bien, pero «completamente rotas de dolor» ante la magnitud del terremoto. Desde hace cinco años coordinan un proyecto educativo, financiado por el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, junto con la ONG Maye, que da formación a 250 menores de entre 3 y 5 años. De ahí el estrecho conocimiento de la realidad del país más pobre de Latinoamérica.«Lo peor en estos momentos es la falta de información que tienen ellas y que tenemos nosotros aquí en Tenerife. Sabemos que están bien y que una de las cooperantes va hacia la capital para saber qué ha sido de la familia de una de las maestras haitianas de la escuela», afirma Nuria Martín, de la asociación Estamos con Haití.De hecho, pese a estar alejados de Puerto Príncipe sintieron los efectos del seísmo. «La primera vez que contactamos estaba muy nerviosa por que el mar se había retirado varios metros de la costa. Se han salvado gracias a que no están en la capital», añade Martín.Para Nuria está situación es especialmente dura, sobre todo después de haber vivido durante dos meses en Puerto Príncipe. «Tengo un dolor fuertísimo por todo lo sucedido. Es un pueblo encantador. No soporto ver las imágenes de la televisión; incluso he visto alguna cara conocida entre los afectados», añade.
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